lunes, 9 de noviembre de 2009

Recuerdos

“Si fuese menos caprichosa, podría haber obtenido el amor de esa persona. Cuando hace esas escenas llenas de frivolidad, hay gente razonable que se las cree enteritas”, decía el horóscopo de La cuarta el día en que nací. Y no sé si es que esa frase tocó una parte de mí que creí olvidada, pero fue motivo de unión de muchos hilos que quedaban sueltos en mi historia, lo de caprichosa me cayó como anillo al dedo.
Aquel diario estaba en los archivos de la biblioteca un día miércoles, como si fuera parte de una ironía, miércoles como el día en que fui víctima de mi madre; miércoles de ceniza, más irónico aún, porque desde muy cría la religión resultó ser la cosa en lo que menos me refugiaría, incluso con una abuela materna algo aficionada, que me obligaba a ir a la misa de las 10 todos los domingos en una pequeña capilla cerca de nuestra casa, o a las interminables catequesis que por muy extraño suene, me destacaba sin esfuerzo. Y no es que aquel rechazo se fundamentara en una mala experiencia, al menos no hasta ése entonces, sino que el capricho y la testarudez muchas veces son la cobija de la infancia. Rezar era aburrido, y yo quería volar si hubiese sido posible, entrar en mundos llenos de personas desbordando afecto, en donde apenas pudiera moverme…

(...)
Cuando mi mamá volvió a Chile, los veranos eran de Valparaíso. Las noches eran tan frescas, las luces de la cuidad desde el cerro que me cobijaban y me traían una nostalgia que jamás me pude explicar, tal vez eran los colores o las formas que se creaban, o simplemente la idea de que había un montón de gente acoplada en un lugar que parecía ser tan pequeño, como en mis sueños, Valparaíso de noche era la caja de los recuerdos que creaba en las tardes llenas de adultos, de música que no entendía y de conversaciones de las que siempre era excluida. El olor del mar se asomaba por las ventanas, el tango que me enseñó a bailar mi segundo abuelo por las tardes nos hacía tanto reír, el olor de madera de la casa y los paseos a laguna verde…


mi biografía fue lo último que escribí :D

2 comentarios:

Pali dijo...

Está buena, sencillamente dan ganas de leer la autobiografía completa.

:B

Josefina Styles dijo...

qué nos pasa?

ojalá ke no te de sida.
ahora soy suuperjose.blogspot.com